Por Lihuel Valcarlos *
La hegemonía mundial de Estados Unidos muestra ciertos síntomas de crisis. Para mantener la oferta de dólares, EEUU. financia su déficit fiscal con deuda y emisión de dinero, agravando la desigualdad. La deuda global ha alcanzado sus niveles más altos desde la Segunda Guerra Mundial, afectando a los aliados de EEUU., mientras la desigualdad impulsa la polarización en Occidente. Debido a estas dificultades, nuevas potencias emergentes han comenzado a cuestionar el sistema internacional vigente, lo que configura el escenario de una crisis en el orden mundial.
Estos desafíos de EEUU. encajan en el ciclo histórico de ascenso y caída de grandes potencias descrito por Ray Dalio[1], en donde grandes ciclos de nuevos órdenes mundiales han sido presididos por nuevas potencias, lo que ha alterado tanto los órdenes internos como externos de los países y sus relaciones entre sí. Según Dalio, los imperios pueden medirse a través de ocho dimensiones: la educación, la innovación en investigación y desarrollo tecnológico, la competitividad en la venta de productos, un sólido producto bruto interno (PBI), la capacidad de comerciar con la mayor cantidad posible de países, un gran poderío militar y financiero, y, por último, el establecimiento de su moneda como reserva de valor mundial. La fase final de una hegemonía es cuando su moneda se vuelve reserva mundial, lo que paradójicamente terminando provocando su declive.
El surgimiento de un nuevo sistema mundial generalmente sigue a un conflicto a gran escala, aunque también puede ser pacífico. Cuando un imperio cae y surge uno nuevo que no puede ser desafiado, el mundo entra en un periodo de paz y prosperidad. La participación del nuevo imperio en el comercio crece y su moneda se vuelve reserva de valor. Esta ventaja, sin embargo, lleva al imperio a financiarse mediante deuda, ya que otros países ansían obtener su moneda. Aunque a corto y mediano plazo esta situación aumenta el poder adquisitivo del imperio, a largo plazo debilita su salud financiera. Financiar el consumo interno y el gasto militar mediante deuda se vuelve insostenible. El declive del imperio puede ser gradual, hasta que las deudas y una recesión económica llevan al colapso. Si el gobierno no consigue prestamistas, la burbuja estalla y el país entra en crisis. En respuesta, el gobierno suele imprimir más dinero para pagar sus deudas, lo que deprecia la moneda y genera inflación. Finalmente, cuando los tenedores de la moneda de reserva y bonos pierden confianza, venden sus activos masivamente, precipitando el colapso del imperio.
En la actualidad, Estados Unidos parece estar en un posible declive. Internamente, enfrenta una creciente desigualdad estructural y una polarización política cada vez más aguda. Su población consume más de lo que produce y financia su déficit comercial con deuda mediante emisión de bonos o más dólares. El techo de la deuda ha sido elevado innumerables veces, y cada vez que esto ocurre, se desencadena una crisis política, resultado de la polarización interna. A corto plazo, EEUU. podrá sostener su modelo de déficit y deuda creciente, pero en el mediano plazo, podrían surgir problemas serios si la deuda sigue aumentando, especialmente si la demanda de dólares cae por una diversificación de las reservas internacionales, tendencia que podría acentuarse en el largo plazo.
China está formando alianzas para un futuro multipolar, donde se posicionará en el centro del sistema e intentará definir las condiciones del nuevo sistema. La creación de los BRICS (hoy BRICS+), compuestos por economías emergentes, busca desafiar al G7. Los BRICS, con tasas de crecimiento económico más elevadas, con poco menos de la mitad de la población mundial y vastos territorios ricos en recursos naturales, están en una posición favorable para desempeñar un rol más significativo en el escenario global.
China posee varias ventajas para desafiar el orden mundial; su sistema educativo, sus alianzas estratégicas y su creciente influencia financiera. Sin embargo, el poder militar es un aspecto clave para sostener esta competencia. Los costos de mantener la hegemonía militar estadounidense, junto con el declive comercial, han llevado al país a adoptar estrategias de reshoring y nearshoring, y a que apueste por el desarrollo de tecnologías avanzadas, como se evidencia en la Ley de Chips y la Ley de Ciencia. ¿Por qué? simplemente es por una cuestión de seguridad en la capacidad de defensa del país, quien desea mantener su ventaja tecnológica en el ámbito militar, reduciendo su vulnerabilidad ante interrupciones en el suministro. Washington es vulnerable ante un conflicto en el Estrecho de Taiwán, que podría escalar rápidamente, provocando una interrupción en los suministros de chips y semiconductores.
Estas tensiones geopolíticas afectan tanto las estrategias militares como las dinámicas comerciales y financieras. Ya se observa una transición de bienes que reducen su dependencia del dólar, como el petróleo. China y Rusia han firmado acuerdos para comerciarlo en sus monedas, y la entrada de Arabia Saudita al BRICS+ es un hito, ya que este país, aliado tradicional de Washington, no ha renovado su acuerdo del petrodólar, que le otorgaba a EEUU una especie de "energía gratis”.
Por su parte, Estados Unidos sigue defendiendo su liderazgo en el sistema financiero global. El aumento de las reservas de oro a nivel mundial refleja la desconfianza en el sistema financiero actual. Washington ha utilizado instituciones como la Sociedad de Telecomunicaciones Financieras Interbancarias Mundiales (SWIFT) como herramienta de poder y disuasión. SWIFT ha sido utilizado para sancionar a países que desafían el orden mundial, como Rusia[2]. Sin embargo, Washington opera con pleno conocimiento del riesgo que implica una medida tan radical, entendiendo que el sistema es anticuado ante el avance de las nuevas tecnologías. Por lo que el gobierno de Washington aprovecha el potencial de esta herramienta, que pronto quedará obsoleta. En respuesta, China ha desarrollado el Sistema de Pagos Interbancarios Transfronterizos (CIPS), que permite a sus socios comerciales realizar transacciones en yuanes sin pasar por el dólar, en un claro esfuerzo por avanzar hacia la desdolarización[3], que no es suficiente teniendo en cuenta que ni el renminbi, ni la economía China cuentan con las características necesarias para proveer de una moneda como reserva de valor.
Los BRICS han desarrollado infraestructuras financieras que facilitan pagos sin el uso del dólar. El BRICS Pay, es un sistema de pagos en monedas locales, que mejoran el comercio y la inversión entre los países miembros. Representando un paso hacia la creación de una infraestructura financiera. El sistema está diseñado para aprovechar tecnologías avanzadas y digitales que optimizan las transacciones financieras. Y esto nos lleva a la creación de las Monedas Digitales de Bancos Centrales (MDBC)[4]. China ha sido pionera en el desarrollo del yuan digital, ha realizado pruebas con resultados positivos a pequeña escala. La adopción de las MDBC por otros países acelerará la tendencia hacia un sistema multipolar, donde el dólar perderá hegemonía a favor de una red de monedas digitales interconectadas, que agilizarían el sistema financiero.
En este contexto, EEUU. ya está desarrollando nuevas infraestructuras para la transición financiera. Tecnologías como blockchain y criptomonedas desempeñan un papel crucial. Entonces, tendremos a las MDBC que ofrecerán seguridad y estabilidad estatal, mientras que blockchain brindará transparencia y eficiencia en las transacciones internacionales. La empresa RIPPLE, con su criptomoneda XRP, ofrece una plataforma que permite realizar transacciones internacionales en segundos, sin necesidad de intermediarios tradicionales como el dólar[5]. Esta tecnología, de la empresa estadounidense, ofrece una solución para los desafíos técnicos y logísticos asociados con la adopción de MDBC. En este escenario podemos tener reservas internacionales provenientes de activos respaldados por múltiples commodities y las mismas MDBC, sumadas a una diversificación de activos financieros que además de los commodities físicos, podrían incluir activos financieros como bonos soberanos o activos indexados a sectores claves. Mientras tanto se estudian tecnologías innovadoras como los mecanismos de estabilización automática, que son sistemas que utilizan algoritmos y tecnología avanzada para ajustar dinámicamente las reservas o la composición de activos en respuesta a cambios en el mercado.
En definitiva, el proceso de desdolarización del sistema financiero global es consecuencia de la transición hacia el nuevo sistema multipolar y la transformación tecnológica. Se trata de un cambio estructural impulsado por nuevas tecnologías que remodelan las reglas del juego. Estados Unidos y China, aunque compiten por el liderazgo, en este nuevo mundo multipolar convergen en la implementación de infraestructuras financieras avanzadas que redefinirán las transacciones globales.
* Politólogo de la Universidad Nacional de Lanús. Especialista en China Contemporánea y analista internacional.
Fuentes
Dalio, Ray. 2022. The Decline and Fall of Empires: A Powerful Look at How Great Societies Rise and Fall.
Katz, Sebastián. 2022. ¿Qué es el Dinero Digital de Bancos Centrales (CBDC)? Una introducción a sus principales características, oportunidades y riesgos potenciales. Documentos de Trabajo N. 100. Banco Central de la República Argentina. Edición electrónica.
Liu, Zongyuan Zoe, and Mihaela Papa. 2022. Can BRICS De-Dollarize the Global Financial System? Cambridge: Cambridge University Press.
Moreno, Álex. 2022. "¿Qué es SWIFT? El arma financiera para hacer pagar a Rusia la invasión de Ucrania." Nombre de la publicación o medio.
Schulz, J. 2018. "La construcción de un nuevo sistema monetario y financiero mundial. Del BAII y el Banco BRICS al petro-yuan-oro." Ponencia presentada en el IX Congreso de Relaciones Internacionales, 14-16 de noviembre, La Plata, Argentina. https://www.memoria.fahce.unlp.edu.ar/trab_eventos/ev.16999/ev.16999.pdf.
Schwartz, David, Noah Youngs, y Arthur Britto. 2014. "The Ripple Protocol Consensus Algorithm." Ripple Labs Inc.
[1] Dalio, Ray. 2022. The Decline and Fall of Empires: A Powerful Look at How Great Societies Rise and Fall.
[2] Moreno, Álex. 2022. "¿Qué es SWIFT? El arma financiera para hacer pagar a Rusia la invasión de Ucrania." Nombre de la publicación o medio.
[3] Liu, Zongyuan Zoe, and Mihaela Papa. 2022. Can BRICS De-Dollarize the Global Financial System? Cambridge: Cambridge University Press.
[4] Katz, Sebastián. 2022. ¿Qué es el Dinero Digital de Bancos Centrales (CBDC)? Una introducción a sus principales características, oportunidades y riesgos potenciales. Documentos de Trabajo N. 100. Banco Central de la República Argentina. Edición electrónica.
[5] Schwartz, David, Noah Youngs, y Arthur Britto. 2014. "The Ripple Protocol Consensus Algorithm." Ripple Labs Inc.
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